Tras varios días empapándonos de la centenaria y recién rescatada cultura jemer, en donde he tenido la suerte y la oportunidad, no solo de visitar el imponente complejo de templos: Angkor Wat, Banteay Srey, Banteay Samre, Angkor Thom, el Templo de Bayon, Ta prohm o Phrah Kan; sino además de poder fotografiar a los ciudadanos de Camboya y su aptitud ante su extenso e importante patrimonio, abandonamos Siem Reap felices de la experiencia humana, con la que no contábamos, y acabamos de vivir y compartir con estas gentes tranquilas, amables y acogedoras.
Vaya esta galería de fotos a modo de despedida del lugar.
